En la clase de hoy, hemos estado viendo como el profesor hacía un molde de arcilla con las manos de Alberto. Para ello, el profesor ha traído un poco de arcilla y ha cogido un voluntario para sacarle su mano en un molde de arcilla.
A continuación, retiraremos el molde y dejaremos que se seque. Después en el hueco de la arcilla nos untaremos los dedos con agua y le daremos a la arcilla por dentro para tapar las posibles grietas que queden, para evitar así que esas grietas salgan en el molde de escayola y a su vez que la escayola no se desparrame a la hora de echarla en el molde de arcilla.
Una vez sacado el molde, procedemos a rellenar este molde de arcilla con escayola y así quedaron las manos de Alberto.
Esta experiencia me ha resultado interesante, creo que siempre que estamos en clase de plástica con estas cosas los alumnos se quedan sorprendidos por que se sale de la monotonía de todas las clases. Además, a mi me ha recordado la arcilla, a cuando estábamos en parvulitos y jugamos con la plastilina como con la arcilla y nos poníamos de plastilina hasta el cuello jejeje.
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